NAVIDAD EN VERANO
Al combinarse el movimiento de traslación y la inclinación
del eje de rotación se producen las estaciones del año; la inclinación del eje
determina que las estaciones inicien en diferente fecha en cada hemisferio. Cuando
en el polo Norte está inclinado hacia el Sol, en el hemisferio Norte es verano,
y los días tienen mayor duración; mientras tanto, en el hemisferio Sur es
invierno, y en este caso los días son más cortos. Seis meses después, cuando el
polo Sur está inclinado hacia el Sol, se invierten las estaciones.
En el transcurso del año ocurre un aparente desplazamiento
del Sol entre los dos trópicos, lo que ocasiona que no todas las partes de la
Tierra tengan igual iluminación ni la misma temperatura, a pesar del hemisferio
en el que se encuentren.
Cada estación del año corresponde a una posición de la
Tierra en relación con el Sol. Cuando los rayos del Sol inciden en forma
vertical en el ecuador, se producen los equinoccios, y el día y la noche tienen
igual duración en todo el planeta (12 horas); es el inicio de la primavera para
un hemisferio, y el otoño para el otro.
Durante los solsticios, los rayos solares llegan
directamente a uno de los trópicos. En ese caso, es el inicio del verano para
un hemisferio, con días largos y noches cortas; y el inicio del invierno para
el otro hemisferio, con días cortos y noches largas.
Estos sucesos determinan la forma de vivir en diferentes
lugar, principalmente por que el ser humano realiza sus actividades con la luz
solar. Existen festejos a lo largo del año que aunque sean celebrados de manera
internacional no se viven de forma similar, un ejemplo son las temporadas
navideñas, mientras que en París, Londres, Moscú o New York se asocia con el
frío, la nieve, Santa Clous muy abrigado; en Madagascar, Brasil o Australia
lucen el sol de verano con temperaturas entre los 25 y los 38 °C, con
costumbres de festejo en sus playas y la visita de un Santa Clous especial
vestido con amplios pantalones cortos.
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